lunes, 4 de mayo de 2015

Bachillerato en el IES San Juan de Dios

Esta semana tenemos que hablar de nuestros años estudiando en el IES San Juan de Dios, aunque para la mayoría de la gente de la clase son seis o más años, para mi solo han sido dos porque vengo de Paterna.
Sin duda fue una difícil decisión escoger el instituto en el que iba a pasar los dos siguientes años de mi vida, aunque después de hacer la visita a ambos institutos, tuve las cosas más claras, concretamente tuve claro que me iría al Sidón.
Esa es una de la anécdotas que quiero contar, la primera vez que entré en el San Juan, mi primera impresión fue que aquello no parecía un instituto, ya que visto desde fuera parece que forma parte de la iglesia. Además no empecé con buen pie, nada más entrar casi me caigo con un escalón que había en la entrada (que después de las obras se convirtió en una rampa), en ese momento no tenía ni idea de los que me esperaba en el interior del instituto.
Ese día los de primero de bachillerato hacían la performance sobre la historia del instituto, de cuando era un hospital, nadie nos había dicho nada de aquello, todos nos quedamos muy sorprendidos cuando entramos y vimos el patio de columnas lleno de gente vestida de época. Sin duda lo que más llamó nuestra atención era que llevaban a un "muerto", con un montón de gente "llorándole" detrás.
Aquello no parecía un instituto, el patio de columnas, que estuviera dividido en diferentes edificios, el salón de actos tenía un techo extraño y los alumnos se movían en los intercambios cambiando de clase.
Incluso entramos en una de las aulas y nos encontramos que la gente estaba disfrazada dentro (eran alumnos que participaban en la performance). Ver todo aquello después de haber visitado las instalaciones del Sidon, hizo que la inmensa mayoría de la clase se decantara por el Sidon (incluyendo a todas mis amigas).
Pero yo había visto algo en el San Juan que me había gustado, no sabría decir exactamente qué, tal vez lo bien que les había quedado la performance, o quizá lo bien que parecían estar pasándolo mientras lo hacían.
En un  principio dije que me iba al Sidon, pero me enteré tiempo después que me iba a mudar a Medina, me hizo replantearme mi decisión, ya que pensé que yéndome al Sidon con todas mis amigas, permanecería con ellas y no haría tantos amigos de Medina. Eso sin duda sería un problema viviendo aquí. Además, mis profesores mi aconsejaron el San Juan, ya que dicen que prepara mejor para selectividad. Así fue como terminé estudiando allí.
El primer día estaba muy asustada, no paraba de preguntarme "¿por qué te has metido en este lío? ¡Con lo bien que podías estar con tus amigas en el Sidon!" Pero los miedos están para vencerlos, así que le eché todo el valor que pude y entré al instituto.
Durante el primer trimestre tuve algunos problemas con matemáticas, pero en poco tiempo me puse al día, estudiar aquí supuso un reto en muchos sentidos. 
De mi estancia en el San Juan me llevo muchas buenas lecciones, como no tener miedo a empezar de cero en un lugar, que esos amigos de toda la vida no tienen por qué ser tus únicos amigos y que es posible llorar de risa.
Segundo de bachillerato ha sido un año muy intenso, durante este curso me he dado cuenta de que muchas de las veces que me quejado durante la ESO de que tenía muchas cosas que hacer, eran sin motivo. La presión de selectividad y la sensación de que tienes el futuro en tus manos lo ha estado haciendo todo más difícil. Aunque nunca han faltado grandes amigos, que en sólo dos años se han vuelto muy importantes en mi vida, gente que te apoya y anima a seguir adelante. También los profesores han puesto todo su empeño en facilitar en la medida de lo posible este curso, creo que nunca habíamos tenido una relación tan cercana a ellos, sin duda los recordaremos con mucho cariño cuando nos vayamos. 
La verdad es que no me arrepiento de mi elección y aprecio mucho todo lo que he aprendido, estos dos años han pasado volando, casi no me he dado cuenta, ahora toca empezar de nuevo en otro lugar, pero la verdad no tengo ningún miedo a hacerlo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario